El Convento de las Animas

Dicen los rumores, que a comienzos del siglo XIX, cuando las Monjas llegaban a Concepción, fundaban su convento e internado de la Inmaculada Concepción, deciden abrir en la casona una pequeña capilla y un Hospicio. En él ofrecerían una comida caliente a los más necesitados de la zona, a cambio de su conversión al catolicismo y devoción a la iglesia.

Pronto comenzaron las habladurías en la ciudad; rumores inquietantes de quienes visitaban el hospicio, ancianos desaparecidos de manera misteriosa, ruidos y gritos que solo se oían de noche, pero un convento inmaculado sin huellas de nada abría una brecha hacía más dudas. Algunos aseguraban que las monjas los enterraban bajo el convento, mientras que otros susurraban que los utilizaban en sus comidas.

Con el paso del tiempo, los mitos, rumores y leyendas en torno a la capilla se fueron multiplicando. La capilla con el tiempo fue abandonada, pero muchos curiosos, turistas y excursionistas, atraídos por el misterio, se han atrevido a entrar en busca de respuestas... sin embargo, nunca regresaron.

Hoy, ustedes han decidido cruzar estas puertas malditas.

La Misión: descubrir el secreto que ocultan las monjas.

Objetivo: escapar con vida... si pueden.